sábado, 13 de noviembre de 2010

Capitulo 1


Estados Unidos, 2010

Al fin consiguió salir de aquel maldito lugar. Había paz, amor, no trabajaban, siempre alegres, y ni tan siquiera existía el pecado. ¿Pero en qué mundo había estado viviendo? Ni tan siquiera la gente- si es que a esos seres alados de plumas blancas y perfectamente suaves se les podía llamar así- sangraba si se hacían un corte. Puaj. Sumamente repugnante. ¿Dónde estaba el mundo con el que había estado soñando durante todos los años en su celda? ¿La masacre, la sangre... el pecado? Definitivamente no ahí.

Pronto se encontró bajando por unas escaleras de oro, viendo como los monigotes que había abajo se movían rápidamente adentrándose en sus casas. Pues vaya...

Y, esas escaleras terminaron por conducirle al lugar que siempre había ansiado visitar: el infierno. No era un experto en reconocer donde se encontraba, pero las llamas y el calor delataban dónde se podía encontrar.

No se lo pensó dos veces y acudió en busca del jefe supremo de todo aquello. Mientras caminaba por esos recónditos pasillos, observaba como la gente sufría, sudaba. Ese sitio le iba a gustar más de lo que se imaginaba.

Una figura apareció delante de él, cortándole el paso. Moreno, de ojos negros como el carbón y un cuerpo extremadamente sexy, y que cualquier mujer habría deseado explorar. En cierto modo se parecía algo a él.

- Paris... hijo mío. Qué bueno verte.- la sonrisa del hombre estaba tensa.- ¿Qué vienes a hacer aquí?- preguntó, aun sabiendo perfectamente a qué venía.

- Acabo de escapar del maldito cielo.- suspiró, lleno de júbilo.- Al fin...

- Me alegro.- comentó el padre.- Veo que las instrucciones que te di te sirvieron de algo.- Paris asintió.

- Ahora quiero ver a esa muchacha. La deseo.- dijo Paris con la voz ronca. Su padre hizo un mohín.

- Urhg... Al parecer, la chica era más lista de lo que pensé, y se escapó.- el chico alzó sus cejas castañas, arqueándolas, y abrió sus ojos marrones demasiado.

- ¿Dónde está? No será muy difícil encontrarla.- inquirió, con un encogimiento de hombros.

- En la Tierra. Te permito que vayas en su busca, pero con una condición: tráela de vuelta con vida.






Giselle respiró profundamente cuando atisbó los primeros rayos de sol en su cara. ¡Lo había conseguido! Había conseguido escapar de aquel infierno. Estaba llorando, y la ropa la tenía rasgada, como consecuencia de andar por aquellas cuevas llenas de pinchos. Tenía frío... Y ni siquiera sabía dónde se encontraba.

Una ciudad... Había escuchado que encima de aquel lugar que no se atrevía a mencionar había una ciudad, con gente amable, y donde, al menos, podías dormir y no morirte de hambre.

Mientras caminaba por aquellas calles llenas de gente, se chocó con alguien. Intentó no gritar, pero se le escapó un sonido ahogado, creyendo que los demonios habían venido a buscarla para llevarla de vuelta.

- Lo siento... ¿Estás bien?- preguntó un adolescente rubio, de grandes ojos azules, y su misma altura. Giselle asintió, asustada. Pero pronto se acabó relajando.

Aquel chico no era un demonio. Había algo en él... que hacía que ella se sintiera como en casa... A pesar de no saber qué era eso.

- Soy Gabriel, pero llámame Gabe, ¿vale?- Giselle volvió a asentir, esta vez más tranquila. Gabe la miró de arriba a abajo, reparando en las pocas ropas que llevaba, sucias y rasgadas. Un simple pantalón corto negro, y una camisa que la estaba grande y rota. Sintió pena por ella.- ¿Tienes hambre?- la preguntó, viendo sus pómulos marcados y los huesos de sus caderas.

- Sí.- esa fue la primera vez que ella le dirigió la palabra, y él se quedó estupefacto. Su voz era como la de los ángeles: aguda, suave y hermosa. Gabe se preguntó cómo cantaría...

- ¿Qué te parece si te vienes a mi casa y te doy algo de comer?- ella frunció el ceño, y Gabe se apresuró a añadir:- No te haré nada, lo prometo. Cuando quieras serás libre de irte.

Giselle, mirándole algo más convencida, tomó la mano que le estaba ofreciendo Gabe, y se dejó conducir por aquella ciudad que la daba escalofríos, hasta un lugar más tranquilo y apacible. 





Espero que os haya gustado el capitulo. Siento haber tardado tanto... T.T Liada con exámenes =( 

Ya tengo las fotos de los personajes principales que saldrán en la historia. 

Comentad, plis.

XoXo

Savannah

jueves, 4 de noviembre de 2010

Prólogo

Launceston, (Inglaterra) 1991.

La mujer arropó a la pequeña niña de cabellos rubios con una pequeña manta, mientras caminaba por las deshabitadas calles, en busca de su cita. Habían acordado encontrarse allí para realizar el cambio. Cuánto echaría de menos a este pequeño ángel... Sus padres estarían furiosos tras enterarse, pero el “oráculo” había predecido el destino de estos jóvenes, y, si no, las cosas entre el mundo de los ángeles y demonios iban a empeorar más de lo que ya están.

Una figura masculina apareció en el callejón. Había llegado. Solo tenían que realizar ya el intercambio, y encerrar al niño después.

- Aquí está.- habló la mujer, enseñando la cabeza adormilada de la pequeña. El hombre asintió, y la cogió, dándole el niño demonio que tenía él a aquella mujer.

- Espere.- llamó el hombre, cuando vio que ella se alejaba.- ¿Cómo sabrán si es la muchacha ángel?

- Tiene tatuadas unas alas en la piel de su omoplato. No creo que sea muy común la forma de las alas.

- La recomiendo una cosa, madame.- advirtió el hombre, levantándose la capa, y dejando ver su rostro ojeroso y cansado.- En cuanto llegue al cielo, enciérrelo. No sobrevivirá si ve su mundo; no podría sobrevivir. A nuestras criaturas les resulta imposible sobrevivir a un mundo donde el bien predomina en cada rincón.

- Le digo lo mismo, entonces. Nuestra muchacha atraerá a muchos demonios a lo largo de los años, les recomiendo que no la hagan daño; si no, la profecía no se cumplirá.

- Haremos lo que podamos.- finalizó el hombre, dándole la espalda a la mujer.


Pobre el destino de los muchachos, condenados a vivir lejos de su familia, lejos de su hogar, lejos de todo lo que necesitan para poder sobrevivir... Y lo más importante, en el mundo enemigo.




Bueno, aquí el prólogo de la historia de mi nuevo blog!! Espero que os guste. Acerca de los personajes, aún estoy buscando a algunos de ellos, pero aquí debo dar un dato importante. A Giselle (o la chica que pensé que era como ella), la descubrí en un video del Youtube, así que os pondré el video. Aquí os lo dejo: 


Esa chica encaja a la perfección con la Giselle que había imaginado. Intentaré poner pronto las demás imágenes. 

Espero que os haya gustado el comienzo de la historia. Siento haber tardado tanto =( 

XoXo

Savannah